La cocina de la provincia de Messina sin duda fue influida por las diversas vicisitudes históricas que siguieron en la isla: los griegos, los árabes, a los normandos, muchos son los contribuciones culinarios presentes en la eno-gastronomía. Ingrediente principal es el pescado, en particular el pez espada, base de muchos platos típicos, cocinado sobre todo con cebolla, ajo, aceitunas verdes y salsa de tomate. Entre los primeros se destaca la pasta «ncasciata», es con carne de ternera, embutidos, berenjenas, queso caciocavallo, huevos, tomates, ajo sal y pimienta; famosas son las sopas de verduras, hinojos, boragos sazonadas con aceite crudo o de pescado con crustáceos y arándanos (presentes también en una sopa de arroz o en los espaguetis al cartoccio). Las carnes como el cabrito se hace a la parrilla y se acompaña de hortalizas y verduras. Típica más de la Caponata, la parmigiana de berenjenas y la tortilla de patatas es el «Maccu», un plato a base de habas secas que pasan a ser, después de una larga cocción, una suave puré. En cuanto a la producción de quesos encontramos el Canestrato, en la versión dulce o picante, el pecorino, la provola y la ricotta. Entre los postres, por un lado la pastelería propone clásicos de la cocina Siciliana como cannoli, cassate, pasta de almendra, fruta martorana y la pignolata; por otra, especialidades típicas de Messina son los «Nzuddi», galletas muy crujiente con almendras y miel. A acompañar las comidas hay los vinos DOC del Etna y los licores a base de cítricos, sin olvidar la famosa Malvasia de Lipari.