La ciudad de Aosta funda sus orígenes en el período del antiguo imperio romano. De este período podemos admirar el arco de Augusto, Porta Pretoria y las antiguas murallas y el anfiteatro romano que aún hoy es utilizado como sede de conciertos y muestra. A estos recuerdos de la antigua civilización romana se flanquean los monumentos medievales, especialmente religiosas, como la Catedral de Santa Maria Assunta y el complejo de la iglesia colegial de Sant’Orso. En la ciudad, al final de enero, hay la Feria de Sant’Orso que es el evento más importante de la zona y que atrae a muchos turistas y curiosos y donde se puede encontrar una amplia selección de artesanías y productos gastronómicos de la región. En el valle entre Pont Saint Martin (primer puebloque se encuentra antes de Piamonte) y Courmayeur podemos admirar los numerosos castillos que durante siglos han sido hogar de varios señores feudales que gobernaron sobre el territorio. Entre ellos podemos destacar el castillo del Bardo, el Castillo di Fénis, el Castillo de Issogne, el Castillo de Verres, el Castillo de Sarre y el Castillo de San Pedro. Además de estos otros numerosos, de hecho en conjunto en la región son más de ochenta. La región, que sólo cuenta una catacteristica alpina, en invierno es el paraíso de deportes de invierno, de hecho cuenta aproximadamente treinta estaciones de esquí incluyendo la zona de esquí de Monte Rosa con el pueblo de Gressoney, la zona de esquí del Monte Cervino con el complejo de Breuil-Cervinia, donde sobre los glaciares se puede esquiar tambíen en verano, la zona del Mont Blanc con las localidades de Courmayeur y la zona del Gran Paradiso con las localidades de Cogne y Pila. En todas las estaciones de esquí que se puede practicar cualquier deporte de invierno, de esquí a snowboard, de esquí de montaña a paseos con raquetas de nieve. En verano, toda la región ofrece caminos y senderos que permiten excursiones en contacto con la naturaleza a descubrir fantásticos paisajes como el que ofrece el lago Azul ubicado a los pies del Cervino. La región ofrece posibilidades para la relajación a los amantes de los Spa, de hecho en la ciudad de Saint-Vincent, hay numerosos balnearios y Spa. Siempre en la misma localidad de Saint Vincent se alberga el Casino (uno de los cuatro que existen en Italia).