Que data del primer siglo a.C., es una villa romana de lujo, cuyos mosaicos artísticos, los baños y los retratos de edad «Flavia» que se encuentra en las capas sedimentarias del edificio, indican que la casa fue habitada hasta el siglo IV, destruida por un terremoto y reconstruida De Marco Aurelio Maximiniano. Después de siglos, aunque degradada, fue ocupada por los árabes en el siglo IX y en fin destruida por el rey normando de Sicilia, Guillermo I, en 1155. Más «palacio» que Villa, el edificio (en estilo románico) es de un nivel de lujo sin igual: el área excavada (pequeña parte del complejo) mesura 4000 metros cuadrados. Y se divide en cuatro áreas, todas con pisos de mosaico de una calidad excepcional. Construida sobre una serie de terrazas, la primera es la entrada monumental: el acceso al patio y, de ellos, a la playa. La segunda, la palestra, conduce a la magnífica frigidarium octogonal, y luego al tepidarium y los tres calidarium. El peristilo, la fuente monumental, con magníficas habitaciones y un pequeño santuario ábside. La tercera rodea el peristilo: el gran triclinium tiene ábsides en tres lados, y está decorado con escenas mitológicas. La cuarta zona se abre en el largo pasillo decorado con escena de caza y uno de los mejores mosaicos existentes, con escenas de captura de animales en África. Esta zona incluye partes de la basílica, una gran sala y la mayoría de las habitaciones. Además de los bellos mosaicos, la villa tiene columnas y paredes decoradas con estuco pintado, de alta calidad artística.