Modena, capital de la homonima provincia, se encuentra largo la histórica vía romana, la via Emilia, cerca de la llanura del Po, en una pequeña altura. Para dos siglos y medio fue Capital del Ducado de Este, período durante el cual sufrió una gran transformación urbanística y arquitectónica. Los monumentos principales son la Catedral romanica, en Plaza Grande, en el corazón de la ciudad, completamente en mármol blanco. Fué incluida por Unesco en la lista de los sitios Patrimonio de la humanidad, junto a la misma plaza y a la Ghirlandina, campanario, cuyo nombre deriva de las balaustradas en mármol, livianas como guirnaldas colocadas alrededor de los pinacúlos. El PaLacio Municipal se encuentra siempre en la Plaza, como la Torre Cívica. Poco distante, se encuentran el Colegio y la Iglesia de S. Carlo, con las grandes arcadas del Colegio, la entrada y la escalera de honor, frescos y hermosas salas. Y aún, PaLacio de Museos, que alberga el Museo Lapidario y la Galeria Estense, que conserva numerosas obras de arte, Museos Cívicos, Archivo Histórico Municipal y la Biblioteca Estense. Largo una de las vías más características atravesada por la vía Emilia, Curso Canal Grande, se encuentran la Iglesia de S. Vicente, el Teatro Municipal, y el PaLacio Ducal, sede de la prestigiosa Academia Militar de Módena. En el resto de la provincia señalamos Nonantola, donde se encuentra la Abadia Benedictina fundada en la midad del octavo siglo por el Abate Anselmo, con en su interior piezas únicas al mundo como los documentos pertenecientes a Carlomagno, Matilde de Canossa y Federico Barbarossa. A Sassuolo se puede visitar el PaLacio Ducal, lugar de vacacione de Francesco ler de Este, con sus espléndidos apartamentos y los frescos que decoran; mientras que, a Carpi, digno de nota es el imponente Castillo conocido como PaLacio de Pio. Por último, para los amantes del automovilismo, a Maranello por no perder es la Galeria Ferrari, que conserva los coches legendarios, imágenes y trofeos del “caballito» más célebre al mundo.