Savona, antiguo centro medieval, es una ciudad fascinante, rica en historia y cultura, no sólo caracterizada por la presencia del gran e importante puerto, pero es una ciudad también capaz de ofrecer al turista más exigente agradables bellezas naturales y particulares estilos arquitectónicos y artísticos. Próspera sobre todo durante los papados de la local familia Rovere, entre el cuatrociento y el quiniento, la ciudad antigua se une a la ciudad moderna, con una renovada ejecución con locales de moda. El polo museal está representado por la Galeria cívica con pintados sobre láminas, vasos de cerámica y esculturas en madera desde el siglo ‘300 en adelante. Es aconsejado además la visita al Santuario de Nuestra Señora de la Misericordia, rico de colecciones valiosas, formadas gracias a los prestigiosos regalos y donaciones de familias señoriales de Savona y Genova. Así adelande sobre la Costa se encontran una tras la otra, las fascinadas ciudades costeras; por Alassio, célebre por la playa finisima y el famoso Murete, a Loano famoso por sus fuentes artisticas, o aún Final Ligure bordada por un ampliada explanada con palmas. Obligado es no descuidar algunos entre los pueblos más hermosos de Italia, entre los cuales Borgio Verezzi, que se presenta cerrado enteramente sobre una colina con sus construcciones en piedra casi como si fuera enrocado entre el Peñón y el mar; Noli, antigua República Maritima; Finalborgo, joya medieval, o Milésima, con el puente fortaleza de la «Gaietta». Poco distante de la costa disparan intactas las dos islas Bergeggi y Gallinara, excepcionales reservas naturales; mientras, Toirano y Borgio Verezzi son famosas por las cuevas, ricas de objetos arqueológicos y fascinantes formaciones rocosas.