Crespi d’Adda fue construido entre los siglos ochocientos y novecientos por la familia Crespi, cerca de su fábrica textil, para albergar a los empleados y sus familias. Hoy día es extraordinariamente intacto después siglos. El pueblo es el modelo perfecto de un complejo arquitectónico, un símbolo del nacimiento de la industria moderna en Italia. Situado en Lombardía, en un lugar aislado dentro de una llanura baja, el sitio está rodeado por los ríos Adda y Brembo, que forman una península llamada Isola Bergamasca. La familia de industriales fabricantes de algodón decidieron crear esta moderna «ciudad de los trabajadores ideales», donde la casa y el Maestro mismo eran un símbolo de la autoridad y de benevolencia hacia los trabajadores y sus familia. La vida de toda la comunidad giraba en torno a la fábrica, sus ritmos y sus necesidades, organizado por el maestro, que proporciona todas las necesidades y todos los servicios necesarios para la vida de la comunidad: iglesia, escuela, hospital, centro de recreación, teatro, baños públicos, establecimientos de comida y de ropa. No muy lejos de la fábrica se encuentra la casa señorial, símbolo del poder de la familia Crespi en una zona más retiradas hay las hermosas villas privadas de los empleados y de los ejecutivos. Hoy día en este sitio reside una comunidad en gran parte descendiente de los trabajadores que tienen vivido o trabajado aquí; la fábrica, siempre en el sector del algodón, en cambio se mantuvo en funcionamiento hasta 2004.