El punto de partida ideal para visitar Ciociaria es su capital, Frosinone. Situada en una posición panorámica en una colina por el relieve irregular, de la ciudad se puede admirar su parte antigua que domina la llanura y la zona moderna de abajo. El casco antiguo es Piazzale Vittorio Véneto donde se puede visitar la Catedral, dedicada a Santa Maria Assunta, de fundación románica y reconstruida en periodos posteriores. Entre los edificios religiosos se destacan el Santuario de nuestra Señora de las Nieves frente a una fuente hermosa del siglo XVIII; la abadía iglesia de San Benedetto, de estilo barroco tardío y la iglesia de Santa Maria delle Grazie, que se remonta al siglo XVI. En cuanto a arquitecturas civiles se incluye el PLacio Pietro Tiravanti, uno de los más imponentes de la ciudad y el PaLacio de Gobierno, sede de la Prefectura, que alberga muebles de la Reggia de Caserta; mientras, el PaLacio de la Provincia, merece la visita por su estilo neoclásico y contiene, además de las obras de Guttuso y Umberto Mastroianni, la famosa Bailarína, la estatua de bronce de estilo Art Nouveau de Amleto Cataldi. En el resto de la provincia se destaca Anagni, con su espléndida Catedral románica, el PaLacio de los Papas, erigido por Bonifacio VIII, el Museo histórico de Bonifacio, Ferentino, con la catedral románica y los restos del teatro romano y el mercado; Alatri, rodeada por murallas poligonales y la Acrópolis en la cima de la colina; Veroli, con la Abadía de Casamari inmersa en un encantador lugar y Fiuggi, uno de las ciudades termales más importantes de Europa. Por final, sugerimos una visita a uno de los monasterios más conocidos de la cristiandad, la Abadía de Monte Cassino, fundada en el siglo VI por San Benedetto.