A Isernia, capital de la homonima provincia, es posible admirar numerosos monumentos entre que la Fuente de la Fraternal, dedicada al Papa Celestino V y que data del siglo XIV, la Catedral, del período alto-medieval y la Iglesia de San Francisco, construida para querer de Francesco de Assisi en 1222. Entre las arquitecturas civiles mencionamos PaLacio San Francisco, en estilo gótico, sede del Ayuntamiento y el Museo Santa Maria de Monjas, que se encuentra en el antiguao convento de Santa Maria Assunta y conserva especímenes prehistóricos de origen paleolitico procedentes de la cercana localidad La Pineta, un sitio arqueológico rico de hallazcos de un antiguo asentamiento humano que data aproximadamente de 730.000 años. Numerosos son los lugares de interés histórico y cultural diseminados en el resto de la provincia a partir de la zona arqueológica de Pietrabbondante, donde se encuentran los restos de lo que fue un habitado de Sannitios entre el siglo II antes de Cristo y el 95 antes de Cristo; para proseguir con el Museo Arqueológico de Venafro, que tiene su sede en el antiguo convento de S. Clara con objetos arqueológicos de la época preromana y romana. Y todavía, a Scapoli, el Museo de la Conamusa donde se exponen Cornamusas de diferentes épocas, italianas y extranjeras, el Museo de las artes y tradiciones populares a San Pietro Avellana y el Museo de las campanas a Agnone. Por lo que respecta los edificios religiosos señalamos el santuario de la Virgen Addolorata de Castelpetroso, donde según la tradición se reveló en 1888 la Virgen María a dos pastoritas y está compuesta por siete capillas para que representan a los siete dolores de la Virgen. No se puede perder también el Retiro de los Santos Médicos Cosma y Damiano, situado en una colina en las proximidades de Isernia y la Abadia medieval tardía de San Vicente al Volturno. Mientras entre los castillos recordamos el Castillo de Pescolanciano y el Castillo de Monteroduni, ambos de época medieval.